¡Hola a todos! En la entrada de hoy, y para finalizar con el bloque de la Enfermedad de Alzheimer, veremos cómo se realiza la intervención de la Terapia Ocupacional en este colectivo.
A través de la valoración, de la que hablamos en el post anterior, el terapeuta ocupacional será el encargado de fijar una serie de objetivos en función de la información recogida, que guiarán la intervención con el usuario, y serán la meta a alcanzar. Para alcanzar los objetivos planteado, se buscarán actividades que sean significativas para el usuario para conseguir una mayor adherencia a la intervención.
El objetivo principal será conservar el mayor grado de autonomía, funcionalidad y calidad de vida posible en el usuario con un diagnóstico de Enfermedad de Alzheimer.
Para el desarrollo de los objetivos específicos, debemos tener en cuenta que se trata de una enfermedad neurodegenerativa y que no vamos a recuperar ninguna función, por lo tanto evitaremos términos como: recuperar, rehabilitar; y haremos uso de los siguientes: mantener, estimular, preservar, conservar, favorecer o fomentar, entre otros.
De cara a la intervención, será importante trabajar el área cognitiva, potenciar la movilidad y el ejercicio físico para mantener rangos articulares y permitir la máxima funcionalidad en la vida diaria. Además, el terapeuta ocupacional deberá ser consciente en todo momento de que en la enfermedad pueden aparecer alteraciones conductuales relacionados con los cambios de humor, por lo que será también un objetivo a trabajar, potenciando y favoreciendo las relaciones sociales con otros usuarios.
TIPS IMPORTANTES:
- Trabajar en un ambiente lo más tranquilo posible.
- Reducir al máximo posible los estímulos distractores que impidan focalizar la atención al usuario mientras realiza la actividad.
- Durante la actividad, el usuario deberá estar tranquilo para que ésta se realice satisfactoriamente. Se evitarán en todo momento, alteraciones conductuales tales como agitación.
- El terapeuta ocupacional deberá usar un tono de voz elevado para evitar que el usuario pierda la atención con la actividad que se está llevando a cabo. Deberá hablar claro, vocalizando muy bien y situándose frente al usuario.
- Con el fin de mantener la orientación personal del usuario, el terapeuta ocupacional deberá dirigirse hacia el usuario llamándole por su nombre.
- Las pautas que se le den para el desarrollo de la actividad deberán ser sencillas, con frases cortas. Si el usuario lo requiere, cada cierto tiempo se le irán haciendo recordatorios de las mismas.
La intervención podrá llevarse a cabo tanto de forma grupal, en grupos de ocho a diez personas aproximadamente, como de forma individual. Las intervenciones grupales suelen ser beneficiosas en estadios iniciales de la enfermedad y tratando de agrupar a los usuarios en función del grado de deterioro que presenten; sin embargo, las intervenciones individuales suelen recomendarse en los estadios más avanzados de la enfermedad con el fin de individualizar el tratamiento, aunque pueden combinarse ambas.
¿Cómo deben ser las actividades desde la intervención de Terapia Ocupacional?
¿Qué actividades o talleres podría realizar?
- Psicoestimulación cognitiva: A través de actividades cognitivas, buscaremos mantener las diversas funciones cognitivas existentes, tales como, memoria, atención, gnosias, praxias, percepción, cálculo, lenguaje, etc. En función de las capacidades del usuario, se podrán realizar de forma oral u escrita a través de fichas.
- Estimulación neurosensorial: Normalmente, para estadios avanzados de la Enfermedad de Alzheimer. Se busca recuperar la conexión con el mundo que les rodea a través de la presentación de varios estímulos de diversas modalidades sensoriales. Un ejemplo, son las Salas Snoezelen (os dejo una fotito por aquí).
- Psicomotricidad: A través de actividades físicas, podemos obtener una visión global del usuario. Se tienen en cuenta el área motora (a través de movimientos), cognitiva (se trabaja memoria, atención, lenguaje…en función de la creatividad del terapeuta ocupacional y de la capacidad de los usuarios), social y emocional (suele trabajarse en sesiones grupales, por lo que se trabajan las relaciones sociales con el resto de usuarios). Como resumen, a través de estas sesiones se trabajará principalmente el esquema corporal, espacial y temporal del usuario. Se pueden utilizar diversos objetos, tales como aros, picas, pelotas, cuerdas…todo lo que nos imaginemos!
- Musicoterapia: La música permite estimular y trabajar el área motora, cognitiva, social, emocional y conductual de la persona. Se trabajará además la reminiscencia a través de los recuerdos que nos provoque la música que escuchamos y estimulando de forma indirecta, el lenguaje, la atención, la orientación, etc. Estas sesiones de musicoterapia mejoran la autoestima, disminuyen las alteraciones conductuales, favorecen las relaciones sociales y afectivas. Es muy interesante realizar sesiones de musicoterapia en todos los estadios de la Enfermedad de Alzheimer.
- Actividades lúdicas: Se trabajarán diversos componetentes promoviendo el ocio y disfrute del usuario en actividades significativas y que resulten de interés para el mismo, eso sí, siempre dando un enfoque terapéutico.
- Actividades funcionales: Como bien sabéis, es fuuuuundamental el trabajo en las actividades de la vida diaria del usuario, ya que nos permitirá conseguir la máxima funcioanlidad en las mismas. Para ello, se establecerán diferentes técnicas (supervisión, mínima ayuda, instrucciones verbales, iniciación de la actividad…) en función del estadio de la enfermedad y de las capacidades del usuario.
¿Se os ocurre alguna más? ¡Poner a volar la imaginación terapeutas!
Nos vemos en la próxima entrada, que disfrutéis del resto de la semana y que seáis muuuy felices todos.